El intendente de Río Turbio advirtió sobre el impacto del ajuste nacional y provincial en las finanzas locales y pidió consensos urgentes para sostener los servicios esenciales.

En un contexto económico nacional marcado por la recesión y el ajuste fiscal, el intendente de Río Turbio, Darío Menna, expresó su profunda preocupación por la abrupta caída de los ingresos por coparticipación, que ya comenzó a poner en jaque la estabilidad financiera de los municipios santacruceños. “Solo en marzo perdimos casi 50 millones de pesos, y para abril proyectamos una baja de otros 15 millones”, alertó el jefe comunal, asegurando que las finanzas municipales están siendo asfixiadas mientras deben sostener servicios, salarios y demandas sociales crecientes.
Menna fue enfático al criticar el impacto de las políticas económicas nacionales: “Lo que para algunos significa equilibrio macroeconómico, para los municipios representa asfixia”. Aseguró además que la merma sostenida en la coparticipación nacional ya afecta también a los ingresos provinciales, profundizando la crisis.
El intendente advirtió que la mayoría de los municipios atraviesan una situación similar, y que de no revertirse esta tendencia, el panorama a corto plazo será “muy complejo”. En ese marco, llamó a construir consensos y buscar soluciones conjuntas: “No vamos a dejar de atender a los vecinos ni de defender el rol del Estado local como garante de derechos”, sostuvo, remarcando la necesidad de preservar la gestión pública como herramienta para sostener a las comunidades frente al retiro del Estado nacional.