La actriz Úrsula Corberó habló hace unos días en el pódcast La Pija y la Quinqui sobre su adicción al Candy Crush. Confesó que llevaba años jugando y que había alcanzado el nivel 27.000. Pero un día decidió borrar la aplicación y, con ello, todo lo que había avanzado en el Candy Crush. Según contó, arrastraba esta adicción desde la pandemia: “Había mucho tiempo libre. La gente hacía yoga y yo jugaba al Candy Crush”. Pero, ¿por qué este juego resulta tan adictivo y qué se puede hacer para romper con esa dependencia?
¿’Candycrusheado’? Haz como Úrsula Corberó y descubre cómo desengancharte de los juegos de móvil
