El encuentro buscó unificar criterios entre la Provincia y la intervención de la empresa, tras las diferencias detectadas en la conducción. Los sindicatos plantearon alternativas para generar ingresos propios y garantizar la continuidad laboral.

En Río Gallegos, el gobernador Claudio Vidal recibió a los gremios nucleados en Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT), entre ellos la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) Río Turbio, encabezada por su secretario general, Matías Delgado. La reunión fue solicitada por los sindicatos ante la necesidad de “clarificar la línea de trabajo” entre la Provincia y la intervención de la empresa, luego de que surgieran diferencias en los mensajes y acciones de ambos niveles de conducción.
Según Delgado, el encuentro permitió poner sobre la mesa una preocupación central: la falta de coordinación entre el gobernador y el actual interventor de YCRT, que estaría afectando la capacidad de reacción de la empresa en un contexto adverso. “En un principio planteamos ejes de producción y planificación, algunas cosas se dieron y otras no, pero notamos que lo que decía el gobernador no coincidía con lo que planteaba el interventor. Así no se puede seguir”, advirtió.
El dirigente gremial remarcó que, a pesar de que los trabajadores cumplen con su labor en la extracción, depuración y transporte del carbón hasta Punta Loyola, la venta del producto no se concreta, a pesar de existir interesados nacionales e internacionales. “Tenemos compradores de Guatemala, Brasil y distintas provincias, pero no entendemos por qué no se avanza. Estamos produciendo con lo que tenemos, pero si no hay ingresos ni inversión, la empresa se va a parar sola”, señaló.
Frente a la negativa del Gobierno Nacional de invertir en YCRT —incluidos los 30 millones de dólares necesarios para reparar y poner en marcha la megausina “14 Mineros”—, los gremios propusieron alternativas para generar recursos propios, como la venta de chatarra en desuso, acuerdos con inversores privados y la búsqueda de compradores directos de carbón. “No queremos darle una razón más a este presidente para cerrar la empresa. Vamos a aportar hasta donde podamos, porque somos de la cuenca y queremos que esto salga adelante”, enfatizó Delgado.
Uno de los planteos más firmes fue que la conducción de YCRT debe radicarse en Río Turbio y no en Buenos Aires. “Basta de manejar la empresa desde Capital Federal. La conducción tiene que estar donde se produce, donde trabajamos las 24 horas y discutimos el futuro de la empresa”, reclamó. También criticó que la transformación societaria y cambios documentales se aceleraran sin antes concretar la venta de carbón, que hubiera permitido demostrar la viabilidad comercial del yacimiento.
Delgado afirmó que todos los gremios de la empresa —incluidos Luz y Fuerza, La Fraternidad y APS— comparten el reclamo de conducción local y trabajo coordinado. Asimismo, pidió que tanto autoridades como asesores “se pongan los pantalones” y participen en la búsqueda de soluciones concretas. “Por Facebook no se salva la empresa. Se salva con propuestas, inversores y una mesa de trabajo seria”, remarcó.
El secretario general de ATE Río Turbio también hizo referencia al contexto nacional de privatizaciones frustradas que afectan a varias empresas del Estado. Participó recientemente de un cabildo abierto sobre energía soberana, donde expuso el potencial del yacimiento y la usina, y advirtió sobre la contradicción de que Argentina compre energía a Brasil producida con carbón, mientras mantiene inactiva su propia planta generadora.
Finalmente, Delgado dejó un mensaje a la comunidad y a los trabajadores: “Sabemos que hay incertidumbre, pero que sepan que estamos trabajando todos los días para que esto continúe. Nos tocó el peor gobierno, uno que no quiere invertir y quiere cerrar la empresa. La vamos a sacar adelante como lo hicimos históricamente, con el esfuerzo de los trabajadores”.