Las ministras Soledad Boggio y Nadia Ricci supervisaron los avances en la pista y en la infraestructura del Aeropuerto “Piloto Civil Norberto Fernández”, cuya reapertura operativa está prevista para el 23 de diciembre.
Río Gallegos se prepara para recuperar plenamente su principal puerta aérea. Tras varios meses de intensos trabajos, las ministras Soledad Boggio, de la Secretaría General de la Gobernación, y Nadia Ricci, de Producción, Comercio e Industria, encabezaron una recorrida por las obras que se ejecutan en el Aeropuerto Internacional “Piloto Civil Norberto Fernández”, acompañadas por el director de Desarrollo Aéreo, Andrés Casanova.
Durante la inspección, las autoridades verificaron el estado de la nueva pista, los avances en infraestructura y los trabajos complementarios que harán posible el retorno de la operatoria regular a partir del 23 de diciembre, día previsto para la reapertura oficial.
La ministra Ricci destacó la magnitud y el impacto de la obra: “Estamos muy contentas y satisfechas de lo que vimos. La pista es la parte más importante del proyecto y se va a poder inaugurar el 22 a la noche”.
El proyecto incluye mejoras en las salas de preembarque, sectores de atención al público y la incorporación del nuevo diseño institucional de Aeropuertos Argentina 2000, modernizando la experiencia del pasajero.
Tecnología inédita en el país
Ricci subrayó que la pista fue construida con tecnología de última generación: “Es la segunda pista del país con estas características. Se utilizó un tipo de material muy moderno, de tecnología alemana, que brinda mayor confort y seguridad en el aterrizaje”.
La obra incorporó además balizamiento LED, fundamental para operaciones nocturnas seguras y eficientes. Según Ricci, la intervención era urgente, ya que la pista estaba en condiciones críticas: “Hacía más de 20 años que no había un reacondicionamiento de este tipo y estábamos a punto de que decidieran cerrarla por cuestiones de seguridad”.
Un alivio para la salud y la conectividad
Por su parte, la ministra Boggio remarcó el impacto que tendrá la reapertura en el sistema sanitario y en la conectividad regional:
“Esto va a alivianar muchísimo las operaciones de aeronáutica de la provincia, sobre todo en las derivaciones de pacientes”, recordó, subrayando que durante tres meses las ambulancias aéreas debieron operar desde Puerto Santa Cruz debido al cierre temporal del aeropuerto capitalino.
La obra representa no solo una mejora en infraestructura, sino también una recuperación estratégica para la movilidad, el turismo, la economía y el sistema de emergencias médicas de toda la provincia.
