El secretario de Ambiente y Comunidad, Félix Altuna, analizó el estado de los espacios naturales, los desafíos de convivencia ambiental y el avance del Mercado Municipal, en un balance que marcó un año complejo pero con importantes aprendizajes y proyecciones.

En comunicación con Multimedio El Socavón, el secretario de Ambiente y Comunidad de la Municipalidad de Río Turbio, Félix Altuna, realizó un amplio recorrido por la situación ambiental de la localidad, el uso de los espacios recreativos, el comportamiento social frente al cuidado del entorno natural y el funcionamiento del Mercado Municipal. Agradecido por el contacto, Altuna destacó que “siempre está dispuesto” porque entiende la importancia de informar a la comunidad y acompañar los procesos locales.
Altuna explicó que, aunque la lluvia beneficia al bosque nativo, complica las tareas operativas del área. “Fue un año atípico: lluvias y nevadas fuera de tiempo y el conflicto gremial retrasaron mucho los trabajos, sobre todo en el mantenimiento de espacios verdes”, señaló. Aun así, el equipo continúa recuperando ritmo y adaptándose a las condiciones climáticas.
Uno de los ejes de la entrevista fue el uso del dique San José y del Bosque de Duendes, donde las imágenes de residuos dejaron en evidencia la falta de conciencia ambiental. “Nos cuesta mucho como sociedad entender el impacto que provocan nuestras actitudes. Es un problema en Turbio, en 28 de Noviembre y en toda la zona”, sostuvo. Adelantó que para 2026 se trabajará con una estrategia distinta, articulando con instituciones, escuelas, fuerzas y organizaciones intermedias para ampliar la llegada de la información y la educación ambiental.
En cuanto al Bosque de Duendes, defendió la decisión de cerrar la tranquera durante la semana: una medida inicialmente cuestionada, pero que “el tiempo terminó validando”. Altuna explicó que disminuir el tránsito vehicular permitió la recuperación del entorno natural y que esta modalidad seguirá vigente. “Nuestra responsabilidad es cuidar el bosque para los próximos 100 o 200 años, no solamente para hoy”, afirmó. Señaló además que muchos vecinos colaboran llevando bolsitas y levantando residuos, demostrando que la conciencia ambiental es posible.
En el Dique San José, sin embargo, la situación es más compleja. La Municipalidad insiste desde hace años en acercar charlas a las escuelas, pero la respuesta no siempre ha sido suficiente. Altuna mencionó casos en los que las celebraciones estudiantiles generaron conflictos por la utilización de bengalas o la basura acumulada. “Queremos que todos disfruten, pero sin contaminar. Es un trabajo difícil, largo y colectivo”.
Respecto al uso de otros espacios, recordó que la localidad cuenta con alternativas como el camping de Mina 1, Santa Flavia, el Valle de Primavera y los predios de los sindicatos, para que las familias puedan disfrutar sin saturar siempre los mismos sectores.
En otro tramo de la entrevista, Altuna habló sobre el funcionamiento del Mercado Municipal, cuya experiencia calificó como “muy satisfactoria”. Confirmó que el 13 de diciembre habrá feria de productores en el espacio y que, cerca del 20 al 22, se abrirá para venta de carne y alimentos frescos con miras a las fiestas. Destacó la articulación entre el Estado y los productores: “El municipio brinda el espacio sin costo, el INTA aporta su acompañamiento y los productores hacen un esfuerzo enorme. El resultado está a la vista: la gente compra productos locales, buenos y a precios adecuados”.
Finalmente, consultado por el clima social de fin de año, Altuna reconoció que ha sido un ciclo difícil y que la comunidad llega con poco ánimo, pero remarcó la importancia de sostener la esperanza. “Las fiestas sirven para renovar energías y expectativas. Tenemos que ir hacia adelante con fe, creatividad y esfuerzo. Si trabajamos en comunidad, vamos a salir adelante”.