Con el lema “Madre, danos amor para caminar con esperanza”, vecinos y vecinas de la Cuenca Carbonífera participaron de la tradicional caminata organizada por Cáritas y la Parroquia María Auxiliadora.

Este domingo 5 de octubre se llevó adelante en 28 de Noviembre la peregrinación a María de Luján, una manifestación de fe que reunió a devotos y familias de la Cuenca Carbonífera. La actividad, organizada por Cáritas Parroquial María Auxiliadora, formó parte de la 51° edición de la tradicional peregrinación nacional que cada año se celebra en honor a la patrona de la Argentina.
La jornada comenzó en la Terminal de Ómnibus de 28 de Noviembre, desde donde los peregrinos partieron a pie a las 17 horas acompañando la imagen de la Virgen de Luján hasta la Parroquia María Auxiliadora, donde más tarde se celebró la misa presidida por el padre Marcelo Toledo.
Durante el recorrido, los fieles compartieron oraciones, cánticos y momentos de reflexión bajo el lema “Madre, danos amor para caminar con esperanza”, expresión que guió el espíritu de esta tercera edición local. Desde Cáritas destacaron que la peregrinación no solo representa un gesto de fe, sino también de solidaridad, ya que cada participante colaboró con un alimento no perecedero destinado a las familias que acompaña la organización durante todo el año.




Rocío, integrante de Cáritas, explicó que “la Virgen de Luján es la patrona de la Argentina y de Cáritas, por eso cada año la hacemos peregrinar por los hogares de 28 de Noviembre. Este gesto de caminar juntos fortalece nuestra fe y el compromiso de acompañar a quienes más lo necesitan”.
Previo a la peregrinación, el sábado 4 se realizó una venta solidaria de prepisas organizada por la parroquia, con el fin de recaudar fondos para cerrar el terreno pastoral ubicado en el barrio 700 Lotes, donde se proyecta la construcción de un nuevo salón pastoral comunitario.
Pese a las condiciones climáticas adversas de los días previos, la jornada se desarrolló con un clima favorable y un fuerte espíritu comunitario. “Confiamos en que la Virgen siempre nos acompaña —expresaron desde Cáritas— y nos regala su luz para seguir caminando con esperanza”.