Desde un “tamagotchi” que nutre el amor con preguntas diarias hasta una app que decide al azar quién lava los platos o saca la basura. La tecnología puede convertirse en el mejor árbitro de las relaciones. EL PAÍS ha probado cinco aplicaciones que transforman dilemas cotidianos y tareas domésticas en un juego para que las parejas puedan conocerse mejor y, sobre todo, convivir en paz.




