Personal de la Dirección de Turismo de Río Turbio se llevó una desagradable sorpresa al acudir al Bosque de Duendes para realizar actividades programadas. Al llegar, encontraron que la casilla de ingreso, un punto icónico para visitantes, había sido vandalizada con pintadas.
El Bosque de Duendes es uno de los principales atractivos turísticos de la localidad, un espacio que combina naturaleza y misticismo, ideal para disfrutar en familia y conectar con el entorno. Sin embargo, actos como este atentan directamente contra el esfuerzo por posicionar a Río Turbio como un destino turístico sustentable y atractivo.
Desde la Dirección de Turismo expresaron su descontento y preocupación, destacando que este tipo de incidentes no solo dañan la infraestructura, sino que también generan una imagen negativa para quienes visitan el lugar.
El incidente abre un debate sobre la necesidad de fortalecer una cultura comunitaria que valore y proteja los recursos naturales y los espacios que buscan atraer turismo y dinamizar la economía local.
“Es necesario trabajar desde las bases, en cada hogar, inculcando el respeto y el amor por los espacios que nos rodean. Solo así podremos lograr un cambio cultural que permita mostrar lo mejor de nuestra naturaleza a quienes nos visitan”, señalaron desde el organismo local.
La comunidad está invitada a reflexionar sobre la importancia de cuidar estos espacios que pertenecen a todos y son fuente de orgullo local. Además, las autoridades reiteraron la importancia de denunciar actos vandálicos para tomar medidas y prevenir futuros daños.
El Bosque de Duendes, con su magia y singularidad, merece ser protegido y apreciado, no solo como un atractivo turístico, sino como parte del patrimonio natural de Río Turbio.
